Descripción
Comienza echando el agua a temperatura ambiente en el hervidor de la cafetera y llénalo hasta el nivel de la válvula de seguridad. No exceda este nivel o el café podría quedar demasiado aguado.
Ahora elige tu mezcla preferida de café molido. ¡Advertencia! La mezcla debe tener un molido específico para Moka, no demasiado fino. Llene generosamente el embudo de la cafetera, sin presionar el café.
¿Un pequeño secreto? Pon el fuego a mínimo y tómate tu tiempo; vale la pena esperar unos minutos más para disfrutar de un excelente café. Cuando el café haya subido por completo en el recolector, apaga el fuego.
Ahora el momento crucial: el sabor. Para saborear de la mejor forma todos los aromas que desprende, te recomendamos beber el café nada más servirlo en la taza.