Descripción
Un repaso exhaustivo, hito a hito, de un movimiento artístico rompedor Según muchos historiadores del arte, la aventura del arte moderno surgió en la década de 1870 en París, cuando un grupo de artistas, los impresionistas, empezaron a pintar con pinceladas rápidas e imprecisas. En vez de ampulosas escenas heroicas, retrataban la vida cotidiana y huían de la influencia del círculo tradicional de galeristas organizando sus propias exposiciones.